¿Cómo afecta tu estilo de crianza a tus hijos? Esto es lo que dicen los expertos

Según Annie Pezalla, psicóloga del desarrollo en Macalester College, los padres están ansiosos por encontrar respuestas, y las tendencias en redes sociales hacen que diferentes enfoques se vuelvan atractivos. Sin embargo, los expertos advierten que obsesionarse con la perfección puede generar más presión que resultados positivos.

En los años 60, la psicóloga Diana Baumrind identificó tres estilos principales de crianza: autoritario, caracterizado por reglas estrictas y disciplina; autoritativo, que combina calidez y expectativas altas; y permisivo, con un enfoque relajado y pocas reglas. Más tarde, se añadió un cuarto estilo: negligente, que implica desinterés por parte de los padres.

Aunque estos estilos clásicos siguen siendo relevantes, las nuevas metáforas ofrecen un lenguaje más accesible para los padres modernos. A continuación, exploramos algunos de los estilos actuales y sus posibles efectos.

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Niño emociona en redes al regalarle una soda a su papá por Navidad

Crianza suave

Este enfoque, centrado en la compasión, la calidez y el respeto, prioriza el vínculo emocional entre padres e hijos. Según Sarah Bren, psicóloga clínica, la crianza suave busca comprender la perspectiva del niño. Si bien puede ser similar al estilo autoritativo, su aplicación puede variar dependiendo de los límites y la disciplina establecidos.

Un estudio reciente liderado por Pezalla encontró que un tercio de los padres que se identifican como “suaves” experimentaron agotamiento y dudas sobre sus habilidades parentales. Aunque esta metodología aún carece de suficiente investigación, los expertos coinciden en que combinar calidez con disciplina es esencial.

Crianza quitanieves

Conocida también como “lawnmower” o “bulldozer parenting,” este estilo se centra en eliminar obstáculos del camino de los hijos. Aunque las intenciones suelen ser buenas, esta práctica puede limitar la capacidad de los niños para enfrentar desafíos y desarrollar resiliencia.

Sarah Bren advierte que este enfoque, impulsado por el miedo de los padres, puede transmitir ansiedad a los niños, haciéndolos menos tolerantes a la incertidumbre.

Crianza helicóptero

El término describe a padres sobreprotectores que “vuelan” constantemente sobre sus hijos, interviniendo ante cualquier señal de dificultad. Según Michele Borba, autora de Thrivers, este control excesivo impide que los niños desarrollen habilidades de adaptación y autonomía. “El niño se vuelve dependiente y pierde la capacidad de tomar decisiones,” explica.

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Si bien los estilos de crianza pueden ofrecer guías útiles, los expertos subrayan la importancia de encontrar un equilibrio. En palabras de Kenneth Ginsburg, del Children’s Hospital of Philadelphia,

no se trata de seguir una etiqueta al pie de la letra, sino de ser flexible y responder a las necesidades únicas de tu hijo.”

Con información de Natgeo.